6 jul 2023

imprimir
Desesperada por la conducta de sus hijas
por Carlos Rey

En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos:

«Hace unos meses mi hija mayor, que tiene veinticinco años... llegó con la noticia de que se iba de la casa a vivir sola. Luego me enteré de que tenía novio y que dormía en la casa de él. Rompió mi alma en pedazos, y dejé de verla y hablarle por varios meses....

»Ahora mi hija menor, que tiene diecisiete años... empezó la universidad.... Descubrí en su celular que tiene un lenguaje muy sucio, que miente, que toma licor con sus compañeros... y que se tomaba fotos desnuda y se las enviaba a un joven con el que charlaba.... Además, es... irrespetuosa....

»No sé en qué fallé.... Mi motivo de oración es que Dios se apiade de ellas y que yo muera ya [para no ver a mis hijas en esas condiciones].»

Este es el consejo que le dio mi esposa:

«Estimada amiga:

»... Algunas personas, al enterarse de su situación, no se van a sorprender. Es que saben, al igual que usted, que lamentablemente las relaciones sexuales extramatrimoniales, el lenguaje vulgar, el tomar licor y mentir son conductas comunes y corrientes para muchos jóvenes.... En cambio, usted tiene una visión del mundo diferente de los demás, basada en la fe que tiene en un Dios personal que ama a las hijas suyas y desea lo mejor para ellas.

»Sin embargo, ¿qué pensarán sus hijas acerca del deseo que usted tiene de morir a causa de la conducta de ellas? ¿Acaso su deseo de morir hará que ellas admiren su relación con Dios? ...

»Usted dice que no habló con su hija mayor por varios meses. ¿Cree que con ese enojo le demostró a ella adecuadamente el amor de Dios? ¿No será que ella asocia ese enojo con un Dios vengativo y exigente?

»Su hija mayor ya es adulta, y como tal tiene derecho de vivir con quien mejor le parezca. Usted no tiene que estar de acuerdo con la decisión de ella, pero no por eso deja ella de ser la hija a quien ama. Es un gran error alejar a nuestros hijos adultos a causa de que se niegan a vivir en obediencia a nuestras reglas y normas.

»En cambio, su otra hija todavía es menor de edad. Ahora que usted está enterada de las actividades de ella, le recomendamos que haga lo que pueda para protegerla de esa conducta tan peligrosa.

»La mayor parte del tiempo, el poder que tienen los padres y las madres es económico. Déjele en claro a su hija menor que usted no pagará la cuenta de su teléfono móvil a no ser que tenga acceso para revisar los mensajes de ella. El hecho de que esté enviando fotos de sí misma desnuda demuestra que ella no comprende los peligros que eso implica o encierra. Para la seguridad de ella, le recomendamos que erija barreras al imponer condiciones para lo que usted está dispuesta a pagar.

    »Por último, mantenga la calma, no amenace, no haga nada estando enojada, y dependa de Dios como su guía.»

Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo se puede leer si se ingresa en el sitio www.conciencia.net y se pulsa la pestaña que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 754.