En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos:
«Soy una madre soltera. Desde hace un año vivo con mi pareja. Él tiene una hija y yo un hijo, ambos adolescentes. Siempre compartimos como una familia.
»Hace poco nos enteramos de que los jóvenes tuvieron un acercamiento indebido y, aunque no se consumó el acto sexual, pasaron cosas que no debieron haber pasado. A raíz de eso, mi pareja decidió terminar la relación, y yo me fui de la casa.
»Estoy decepcionada y avergonzada, pues ese no fue el ejemplo que le di a mi hijo.... Estoy destrozada porque mi hogar se destruyó y yo amo a ese hombre. ¡Me siento mal! Mi vida se me cae a pedazos. Estoy deprimida. Tengo rabia, decepción, tristeza.»
Este es el consejo que le dio mi esposa:
«Estimada amiga:
»Nos entristece lo que hicieron los dos adolescentes, y lamentamos la situación en que se encuentra. Quisiéramos ofrecerle esperanza para el futuro de usted y de su hijo.
»Usted da la impresión de que ambos adolescentes consintieron en lo ocurrido. Si uno de los dos hubiera forzado al otro de algún modo... entonces esa información alteraría el consejo que estamos dando al respecto.... [Pero] si hubo consentimiento de parte y parte, entonces ambos son igual de culpables. Como creemos que el plan de Dios es que las relaciones sexuales las tengamos únicamente con nuestro cónyuge, lo que ocurrió entre ellos dos fue indebido y merece la disciplina apropiada.
»Es admirable que su ex pareja sacrificara su propia relación romántica a fin de evitar que la hija mantenga esa actividad sexual. Si más padres solteros le dieran más importancia a lo que necesitan sus hijos que a sus propias relaciones románticas, esos hijos tendrían muchos menos problemas emocionales.
»Usted dice que le dio un ejemplo diferente a su hijo. Nosotros no sabemos nada más acerca de su vida o del ejemplo que da, pero sí sabemos que estaba teniendo una relación sexual con un hombre con el que no estaba casada. ¿Acaso no estaba su hijo simplemente siguiendo ese ejemplo?
»Usted tuvo a su hijo antes de tener la relación con su ex pareja. Siendo así, su mayor prioridad debe ser el que llegó primero. Necesita perdonar a su hijo y concentrarse en ser una madre amorosa que participa en sus actividades y establece límites apropiados para él.
»Sin embargo, usted necesita ayuda para perdonar y poner en orden sus propias prioridades. Le aconsejamos que comience a cultivar una relación personal con Dios, pidiéndole que le perdone sus pecados. Luego busque una iglesia donde las personas que asisten confían en Dios y han cambiado conforme a las enseñanzas de la Biblia. Muchas iglesias tienen grupos para padres solteros que se apoyan mutuamente.»
Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, puede leerse con sólo pulsar la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 533.