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Caso 435

He estado atrapado en la bebida. Eso ha traído muchos problemas en mi matrimonio: peleas, reclamos y muchas cosas más. Le he pedido perdón a mi esposa por mis errores, pero resulta que desde hace unos quince días ella ha estado diciendo que se quiere separar. Acabo de descubrir en su teléfono que ha estado en contacto con un ex novio de su juventud, y he descubierto mensajes que sugieren que podrían verse. No sé si esté siéndome infiel, o por lo menos lo quiere hacer.

Estoy muy angustiado. ¿Qué debo hacer? ¿Confrontarla?

Consejo

Estimado amigo:

El alcoholismo es la causa de la destrucción de muchos matrimonios. Por lo general, el cónyuge que bebe está muy arrepentido después de cada episodio, pero no hace lo necesario para vencer el problema en el futuro. El cónyuge que no bebe es la víctima de la cual se espera con frecuencia que oculte el problema y arregle todo el desorden, una y otra vez. A veces la bebida causa la pobreza, el abuso físico y el abuso emocional.

Usted dice que le ha pedido perdón a su esposa, pero a no ser que se haya comprometido a asistir fielmente a las reuniones de un grupo tal como Alcohólicos Anónimos, o se haya internado en un centro de rehabilitación, sus palabras de arrepentimiento no difieren en nada de todas las que ha dicho en otras ocasiones. Las disculpas no son válidas a menos que vayan acompañadas de un cambio de comportamiento.

Lo que usted ha hecho se parece un poco a la manera en que muchos se disculpan y le piden perdón a Dios. Sí, Dios quiere perdonar. Es más, tal es su deseo de perdonar que envió a su Hijo Jesucristo a morir en la cruz para pagar por los pecados de todo el que le pida ese perdón. Pero el que dice las palabras: «Perdóname, por favor», y luego vuelve a hacer lo mismo de siempre, en realidad no está arrepentido en absoluto. Esas palabras son vanas y carentes de sentido.

Así que las palabras que le dice a su esposa son vanas y carentes de sentido a no ser que usted ya haya comenzado a cambiar. El primer paso para librarse del alcoholismo es aceptar el hecho de que necesita ayuda. Para probar que de veras está arrepentido, busque ayuda hoy mismo y no deje de acudir a ésta todos los días. Es posible que tenga que asistir a las reuniones de un grupo de ayuda durante muchos años, pero si de veras está arrepentido, usted asistirá.

Claro que no está bien que su esposa se vea con un ex novio. Por el momento, la única certeza que usted tiene es que ella se ha comunicado con él. Pero en lugar de espiarla y de revisar el teléfono de ella, y en vez de enfocarse en ellos dos, ya es hora de que se concentre en sí mismo. ¿Qué necesita hacer usted?

Hay una tendencia humana de querer descubrir que otra persona ha hecho algo malo a fin de echarle la culpa a ella en vez de aceptar la responsabilidad de su propia conducta. Si opta por seguir esa tendencia en este caso, no salvará su matrimonio ni comenzará a mejorar su vida.

Le deseamos lo mejor,

Linda

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