de 852
Caso 850

Tengo un progenitor perverso que pretendía conmigo lo que se pretende con una mujer. Dios me salvó de sus garras, por lo que comencé a tener una relación espiritual con mi verdadero Padre que está en el cielo. Aun así, he querido guardar los mandamientos de honrar a los padres, pero en mi caso lo veo imposible. ¿Cómo se puede honrar a un hombre perverso cuando Dios aborrece la perversidad?

Consejo

Estimada amiga:

Sentimos mucho que su padre biológico le haya causado ese trauma indescriptible. Para portarse de un modo tan perverso, los deseos patológicos y malvados que lo impulsaron fueron indudablemente más fuertes que el amor paternal por usted. Él permitió que esos deseos perversos lo impulsaran a actuar como pedófilo en lugar de actuar como padre. Y aunque no la abandonó físicamente, sí la abandonó emocionalmente. Él la engañó y la despojó de la inocencia.

En la mayoría de los casos, los pedófilos tienen más de una sola víctima. Por eso es sumamente importante que usted y su familia protejan a cualquier niña o niño con quien su padre pudiera tener contacto. A los nietos no se les debe dejar nunca solos en casa con él, ni siquiera si está presente la abuela. No se puede confiar en él, aun si dice que está arrepentido por lo que pretendió hacerle a usted.

Si descubre usted que hubo otras hermanas u otros hermanos, primas o primos suyos que fueron víctimas de abuso, entonces su padre cometió más de un delito y debe ser denunciado a las autoridades. Todos los países tienen sus propias leyes en cuanto a los detalles de las situaciones, pero la pedofilia es un acto ilegal en casi todo el mundo. Y quienes tratan de proteger a un pedófilo al mentir y encubrir lo que hizo son personas mal informadas, equivocadas y posiblemente culpables de negligencia penal.

Sin embargo, usted tiene razón acerca del diseño original de Dios para la familia. Los hijos deben honrar y respetar a los padres, aun después de que esos hijos han crecido, y aun si los padres no merecen la honra. Pero eso no quiere decir que los hijos adultos tengan la obligación de obedecer a sus padres, ni que deban ayudarles a cometer actos ilegales, inmorales o perjudiciales. Está bien que los hijos adultos no estén de acuerdo con sus padres, con tal de que eviten ser irrespetuosos con sus palabras y sus actitudes.

En el caso suyo, honrar a su padre pudiera significar tratarlo tan amablemente como a una persona desconocida. Cuando tenga que hablar con él, hágalo con un tono normal y no con sarcasmo o irrespeto.

Es importante reconocer que su padre no merece el perdón de parte suya, pero si usted opta por no perdonarlo, la amargura que usted tiene en el corazón crecerá cada vez más, convirtiéndola en una persona vengativa y resentida. En cambio, si opta por perdonarlo, no piense que con eso está optando por olvidar lo que pasó. Por el contrario, no le dé ninguna oportunidad de abusar de otra criatura, y no lo ayude a encubrir ningún otro acto perverso si es descubierto. Usted no tiene por qué pasar más tiempo con él del que sea necesario. Y nunca jamás confíe en él.

Le deseamos lo mejor,

Linda

Este Caso me ayudó Envíenme información Deseo una relación con Cristo
Información en este sitio