Tengo cuatro años de estar casado, y tenemos una niña de tres años.... Hace dos años conocí a una muchacha a quien considero mi amiga.... Ella sabe que tengo mi hogar. Continuamente nos enviamos mensajes de texto, y son sanas las conversaciones.
Al principio de mi matrimonio cometí muchos errores... los cuales generaron desconfianza en mi esposa. Ella tiene acceso a mi celular, así que leía los mensajes [que nos enviamos mi amiga y yo]. Pero un día yo iba con mi esposa en un transporte público, y nos encontramos con mi amiga, que me saludó con una palmada en la rodilla. Eso a mi esposa no le gustó, y desde entonces me dijo que ya no quería que tuviera comunicación con esa amiga....
No encuentro la forma de hacerle saber a mi amiga que ya no podremos seguir con la amistad, para evitar problemas. ¿Cómo puedo hacer?
Consejo
Estimado amigo:
Lo felicitamos por haberle dado a su esposa acceso a su teléfono a fin de que pudiera volver a confiar en usted. Siempre recomendamos que los cónyuges tengan libre acceso mutuo a sus teléfonos, computadoras y cuentas en las redes sociales. Si no están dispuestos a consentir en ser transparentes el uno con el otro a fin de cultivar la confianza mutua, es probable que tengan algo que ocultar.
Sin embargo, el hecho de que usted no esté seguro de cómo proceder en esta situación indica que su esposa tiene una razón legítima para estar preocupada acerca de la relación con esa amiga. Si su relación conyugal fuera como debiera ser, usted podría cumplir de inmediato los deseos de su esposa y cortar toda comunicación con la amiga. Pero no sabe qué hacer, y mientras siga comunicándose con la amiga, corre el riesgo de perder más de la confianza de su esposa.
También estamos de acuerdo con su esposa en cuanto a que dar una palmada en la rodilla de una persona es un gesto que muestra cierta intimidad. Aun si su amiga es muy afectuosa por naturaleza, ella se propasó cuando lo saludó a usted de ese modo. Es un indicio de que ella no reconoce esos límites sociales o de que a ella no le importa cruzarlos. De cualquier manera, ella se delató como una persona peligrosa para el matrimonio de ustedes.
No debiera resultar difícil encontrar las palabras para hacerle saber eso a su amiga. Decir la verdad es siempre lo más fácil y lo mejor. Dígale que la persona más importante en el mundo para usted es su esposa, y que a fin de comunicarse mejor con su esposa y concentrarse más en su matrimonio, usted dejará de responder a toda comunicación con ella como amiga suya porque esa comunicación se ha vuelto inconveniente. Y dígale que le desea lo mejor y espera que ella comprenda, pero que la decisión que usted ha tomado es final e inmediata.
Tan pronto como le haya enviado ese mensaje de texto, bloquee de su teléfono el número de su amiga y muéstrele a su esposa que lo ha bloqueado. Si su amiga trata de comunicarse de otro modo, no le responda ni una sola vez. Demuéstrele a su esposa mediante sus acciones que usted respetará los sentimientos de ella aun cuando no esté de acuerdo con su manera de pensar.
Aunque su esposa tal vez no sepa con certeza lo que usted de veras siente, Dios sí sabe porque conoce su corazón.1 Pídale que lo perdone por sus errores y pecados, y que de ahora en adelante lo ayude a proceder con toda integridad y honradez.
Le deseamos lo mejor,
Linda
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1 Sal 44:21