Hace dos años me casé luego de una relación larga de cuatro años de noviazgo. Antes ella era mi amiga, pero siento que hoy la desconozco. Me abandonó sin razón alguna y dice que quiere divorciarse. No es la primera vez que ocurre eso. Cuando éramos novios también me abandonó, pero regresó después de un tiempo.

Estoy triste, y ya no sé qué pensar ni qué creerle, y temo que me engañe. Siempre fuimos creyentes en Dios, pero siento que se alejó de Dios también.

Consejo

Estimado amigo:

Tiene razón al valorar su matrimonio y preocuparse por su esposa y su relación con ella. Sin embargo, cuando usted dice que ella lo abandonó sin razón alguna, sabemos que está equivocado. Sí hay una razón, aunque usted no la conozca. Tal vez sea una razón insuficiente o una razón basada en información errónea, pero no deja de ser una razón válida para su esposa.

Quizá su esposa no le dio a conocer a usted esa razón. Aunque eso es posible, es muy poco probable. Estudios han demostrado que las mujeres tienden a hablar mucho más que los hombres, a no ser, por supuesto, que tengan miedo o se sientan intimidadas. ¿Ha herido usted a su esposa física o emocionalmente en el pasado? De ser así, es posible que ella lo esté abandonando para protegerse. Tal vez no se lo haya explicado porque no quiere arriesgarse a ser herida aún más por lo que usted le diga o haga.

En cambio, si no ha herido a su esposa y ella no le tiene miedo, la siguiente posibilidad es que ella piensa que a usted no le importa lo que ella siente o que usted en realidad no la está escuchando cuando ella le habla. Es posible que ella se lo haya dicho alguna vez, pero quizás usted haya reaccionado defendiéndose y negando lo que ella le reclama. Y tal vez usted no la admita como una razón porque la considera falsa (o porque no estaba escuchando cuando ella se lo dijo).

Ustedes dos necesitan que alguien les ayude a comunicarse mutuamente. Les recomendamos que busquen a una persona profesional que pueda descubrir las razones que tiene su esposa y también por qué usted no escuchó o llegó a conocer esas razones. Su médico puede indicarles a alguien que les brinde esa ayuda.

Sin embargo, lo más importante que nos preocupa es que usted sienta que su esposa se haya alejado de Dios. Eso nos suena como si usted bien pudiera haber hecho lo mismo. ¿Sabe usted que a Dios le interesa el matrimonio de ustedes y que Él quiere darles sabiduría y dirección? Le rogamos que renueve su relación con Él hoy mismo, expresándole en sus propias palabras que quiere que esa relación vuelva a ser estrecha. Pídale que le perdone por alejarse de Él, y que le ayude a descubrir la manera de restaurar su matrimonio. Lea la Biblia, ore en sus propias palabras, y asista a una iglesia donde los que se congregan allí siguen a Dios y andan en sus caminos con toda sinceridad.

Le deseamos lo mejor,

Linda

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